Hace unos días, leía este artículo del que hoy os traigo un pequeño fragmento, pero que su lectura completa se puede hacer a través de este enlace. De la tarde del 29 de agosto en Linares, ya hemos hablado largo y tendido, pero me gustaría destacar este artículo de José Luis Bautista en Opinión y Toros.
"Curro Díaz provoco el ¡olé!, el ¡olé! autentico; la embestida sincera del toro le situaba en aquel segundo nivel y al torero en el protagonista principal del trance; fue él, Curro, quien a base de ortodoxia y plasticidad, dándole protagonismo al animal sin abusar de la técnica y en base al comportamiento noble y encastado del toro, fue creando una faena plástica; es él, el torero, el que a través de la creación emociona, y al contrario que en el caso anterior, es el toro el que en un comportamiento a más va creando el equilibrio deseado en la faena."
"Curro Díaz provoco el ¡olé!, el ¡olé! autentico; la embestida sincera del toro le situaba en aquel segundo nivel y al torero en el protagonista principal del trance; fue él, Curro, quien a base de ortodoxia y plasticidad, dándole protagonismo al animal sin abusar de la técnica y en base al comportamiento noble y encastado del toro, fue creando una faena plástica; es él, el torero, el que a través de la creación emociona, y al contrario que en el caso anterior, es el toro el que en un comportamiento a más va creando el equilibrio deseado en la faena."
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