Curro Díaz ha vuelto a abrir la puerta grande, esta vez ha sido en la localidad cordobesa de Belmez frente a un encierro de Jódar y Ruchena.
El primero fue un ejemplar soso y apagado al que Curro Díaz consiguió hilvanarle una faena de mucha torería y belleza, tanto al natural como con la mano derecha, cortando una oreja. En su segundo fueron los dos apéndices que se llevó al esportón tras billar en el toreo al natural, con pasajes para el recuerdo.
Más información:
Puerta de 'Los Califas'
El primero fue un ejemplar soso y apagado al que Curro Díaz consiguió hilvanarle una faena de mucha torería y belleza, tanto al natural como con la mano derecha, cortando una oreja. En su segundo fueron los dos apéndices que se llevó al esportón tras billar en el toreo al natural, con pasajes para el recuerdo.
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